El municipio notificó a los propietarios de bares, boliches y otros locales de diversión nocturna que a partir de la fecha deberán contar, sin excepción, con un plan de evacuación para prevención de siniestros.
Deberá ser presentado ante la Dirección de Inspección General del propio municipio, con firma de profesional habilitante y competente.
“Hay locales que ya lo tienen, pero otros que no. A partir de ahora todos deberán tenerlo. Incluso aquellos locales que están en funcionamiento y ya cuentan con habilitación”, dijo el Sec. de Gobierno, Pablo Hasper.
También deberán proceder a colocar cámaras de seguridad, en lugares estratégicos.
“Lo que buscamos es brindar mayor seguridad y tranquilidad. A quienes concurren a dichos lugares, pero también a los propios dueños”, manifestó el funcionario.
“No nos interesa confrontar con los comercios de diversión nocturna. Todo lo contrario. No se trata de obligar por obligar. A lo que apuntamos es a trabajar en consenso y en alcanzar acuerdos, que vuelvan mas segura la noche en Lobos”, agregó.
“En general estamos conformes con los estándares de seguridad con que cuentan los bares y boliches en nuestra ciudad. Pero creemos que siempre se puede mejorar”, insistió.
“Buscamos llevar tranquilidad a toda la comunidad y que las personas que salen los fines de semana a la noche, sepan que lo pueden hacer en condiciones de seguridad”, completó.
Reunión con bolicheros
Por el mismo motivo el Secretario Hasper comenzó a reunirse con propietarios de comercios de esparcimiento nocturno. El fin es explicarles personalmente las nuevas medidas.
“Queremos que entiendan que no nos interesa ponerles palos en la rueda. Lo único que nos interesa es preservar la seguridad de las personas que concurren a dichos comercios y consecuentemente su propia seguridad”, reafirmó.
“Si pasa cualquier eventualidad, el primer responsable es el dueño del comercio. Por lo tanto, también lo estamos haciendo por ellos y todo lo que podamos hacer para mejorar la seguridad en la noche lo vamos a seguir haciendo”, advirtió.
“Pasa lo mismo que con el uso del casco en los motociclistas. El fin no es cobrar multas, sino evitar que se golpeen la cabeza”, explicó.
“Acá pasa lo mismo. El propósito no es poner trabas a los bolicheros, sino acrecentar las medidas de seguridad para que todos se puedan divertir y pasarla bien, sin correr riesgos”, concluyó Hasper.